Durante mucho tiempo, la boca ha sido vista como un sistema cerrado, separado de la salud general del cuerpo. Sin embargo, una nueva investigación ha comenzado a revelar que lo que sucede en nuestra boca puede ser más importante para nuestra salud en general de lo que pensábamos originalmente.
Recientemente ha cobrado importancia nuestra salud intestinal y, más específicamente, el microbioma intestinal. El microbioma intestinal es el nombre que le damos a los billones de microorganismos que viven en nuestros estómagos e intestinos, y la salud de esta población es parte integral de nuestra propia salud. De hecho, nuestro cuerpo alberga tantos microorganismos (incluidas bacterias) como células humanas, por lo que es importante que mantengamos este ecosistema bajo control.
Sin embargo, se sabe menos sobre el microbioma oral: la segunda microbiota más grande después del intestino. El microbioma oral y el microbioma intestinal están altamente vinculados. Hasta la fecha, se han encontrado más de 700 especies de bacterias en la boca. Por lo general, los dentistas y otros proveedores de cuidado bucal han pasado por la noción de que menos bacterias es mejor. Ahora, aunque estamos comenzando a aprender que no es tanto la cantidad de bacterias en la boca lo que determina la buena salud oral sino la calidad de las bacterias.
Todos hemos oído hablar de los probióticos, pero lo que quizás no nos hayamos dado cuenta es que los probióticos van mucho más allá de ingerir una bebida de yogurth. Los probióticos son bacterias no dañinas que se cree que promueven un equilibrio saludable de las bacterias en tu cuerpo. Cuando tenemos un microbioma oral equilibrado es beneficioso para nosotros de varias maneras:
- Podemos absorber más nutrientes a través de una mejor digestión de los alimentos
- Más energía y mejor almacenamiento de grasa.
- Podemos procesar y comenzar el proceso de desintoxicación de químicos ambientales y otras toxinas
-Funciones más fuertes de barrera cutánea y mucosa
-Promueve un sistema inmune fuerte
-Menos inflamación
Para promover un microbioma oral naturalmente equilibrado, debemos observar lo que nos ponemos en la boca diariamente. Muchos productos para el cuidado bucal contienen detergentes que eliminan todas las bacterias con las que entran en contacto. Muchos tipos de enjuagues bucales, por ejemplo, eliminan la boca de bacterias que pueden causar un desequilibrio en nuestro microbioma oral. El uso de un enjuague bucal natural y suave puede evitar alterar el ambiente bacteriano, permitiendo que las bacterias probióticas prosperen.
Cepillarse y usar hilo dental también es muy importante, y es mejor evitar los productos para el cuidado bucal con ingredientes como: Edulcorantes artificiales, Lauril sulfato de sodio (SLS), Triclosan, Fluoruro de sodio, Propilenglicol y Microplásticos.
Como resultado, estos ingredientes pueden destruir el microbioma y provocar una gran cantidad de problemas de salud. En Georganics evitamos usar estos ingredientes en todos nuestros productos para poder asegurar una boca sana, naturalmente. La nutrición también es clave para un microbioma oral saludable. Se recomienda evitar los carbohidratos refinados y el azúcar, y optar por una dieta rica en alimentos orgánicos y antiinflamatorios como el aguacate, la cúrcuma y las verduras de hoja verde.
Fuentes:
Deo, Priya Nimish, and Revati Deshmukh. “Oral microbiome: Unveiling the fundamentals.” Journal of oral and maxillofacial pathology: JOMFP 23.1 (2019): 122.
Baker, Jonathon L., and Anna Edlund. “Exploiting the oral microbiome to prevent tooth decay: has evolution already provided the best tools?.” Frontiers in microbiology 9 (2018).
Artículo de Geroganics traducido por La Tortuga y La Liebre, autorizado por Georganics UK, haz clic aquí para ver el original.